Domingo segundo del mes de mayo, mes dedicado en la catolicidad a la madre del mesías carpintero, día de las madres del mundo entero. Misa dedicada a ellas. Tener madre es tan bueno que hasta Dios quiso tener una.
Leo la prensa-e y contesto los mensajes de mis buzones en gmail y cantv.
En el evangelio cotidiano el Buen Maestro nos ha indicado que el amor no es sólo emoción pasajera; está vinculado con el escuchar con atención (ob-audire=obedecer): Quien me ama guardará mis palabras. Es decir, hará su vida en la verdad y en el amor, y ofrecerá su cuerpo como ofrenda agradable al Creador, artista de esta creación en la cual la sexualidad es sacramento: el esposo es Cristo, la esposa (y madre) es la Iglesia.
La comunidad se prepara para una comida comunitaria en honor a las madres, dadoras de vida por su región sacra (ver tratado de anatomía). Saludos a todos los lectores de estas pobres líneas, especialmente a las hembras generadoras de nuevas existencias. Dios les bendiga.