En Kavanayén hay muchos preparativos para las celebraciones de este fin de semana: comuniones, confirmaciones y ordenación de Fr. Raúl. Ya el obispo del Caroní, Mons. Jesús Alfonso Guerrero y el Viceprovincial de los capuchinos en Venezuela, Ernesto Romero, se encuentran en esta localidad pemón, en medio de la bella Gran Sabana.
En prensa, más noticias del desastre gubernamental. Una vez más Fuenmayor Toro dice lo que piensa, sin tapujos, llamando las cosas por su nombre, aunque el Gran timonel y sus acólitos puedan arremeter contra él, como lo hacen contra todo aquel que se atreve a decir al rey que está desnudo.
La hermana lluvia acaricia la sabana. Disfruto de una selección de poesía de pueblos originarios hecha por Ernesto Cardenal. Una muestra: 'No podemos morir/ sólo podemos cambiar' (Araucanos). Otra: 'De mí ten piedad/ hazme volar' (Arapajos). Son versos sencillos y profundos, que hablan del poder de la palabra y de la lucidez de las intuiciones de trascendencia, contra los pragmatismos alicortos. Ya dijo el Buen Maestro: 'te doy gracias Padre, porque te revelaste a los sencillos y te ocultaste a los sabios'.