Dijo el Maestro: a cada día le basta su afán.
La pequeña ruta (rutina), con tan mala fama en este tiempo de cambio constante, es muy importante en nuestra vida.
Decía Nietzsche, hablando de la humanidad moderna: tienen algo de lo cual se sienten muy orgullosos, el progreso, y por eso no quieren oir hablar de 'despacio'. Añadía: los antiguos querían ser héroes, los medievales santos, los modernos hozadores (cochinos pues).
Si en la cotidianidad damos lugar al silencio, al cultivo de la interioridad, a la delicadeza en el trato de las creaturas que nos rodean... la cotidianidad y la rutina serán maravillosas.
miércoles, 17 de junio de 2009
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